Un joven discapacitado niega que su madre abusara de él cuando era menor. | Alejandro Sepúlveda

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La Audiencia Provincial de Palma ha absuelto a una madre acusada de violar a su hijo discapacitado en Mallorca, entre 2011 y 2013, cuando este tenía 11 años. El tribunal de la Sección Segunda sostiene que no hay pruebas suficientes para condenar a la mujer.

El joven, que ya es mayor de edad, negó tajantemente los hechos durante el juicio y aseguró que un monitor del centro donde se encontraba ingresado le obligó a contarlo. La acusada también rechazó todo. «Jamás le hice ningún tipo de tocamiento ni le obligué a que me penetrara. Por favor, jamás».

Los jueces consideran probado que el hijo de la acusada, con una discapacidad psíquica del 33 por ciento, ingresó en un centro de acogida en septiembre de 2008. Estuvó interno hasta que cumplió 18 años. La Policía Local de Pollença, el verano de 2013, envió al centro dos informes sobre conductas sexuales inapropiadas del menor cuando salía de permiso.

La Unidad de Valoración de Abuso Sexual Infantil del Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) concluyó, en un informe de octubre del año 2013, que no podía asegurar que el chico hubiera sufrido abusos por parte de su madre. Un educador explicó en el juicio que el menor le contó que mantenía relaciones sexuales con su madre y que utilizaba preservativo para que no se quedara embarazada.

La Sala indica que el joven negó absolutamente los hechos y que «no se ha contado con prueba de cargo que pueda razonablemente ser calificada como suficiente».

El juicio contra la mujer se celebró los pasados días 14 y 15 de febrero. La fiscal mantuvo su petición de 11 años de cárcel para la acusada por un delito continuado de abusos sexuales sobre menor de 13 años con acceso carnal. También reclamó 10 años de libertad vigilada con la obligación de participar en un curso de educación sexual y la prohibición de aproximarse y comunicarse con su hijo durante 15 años. La representante del Ministerio Público solicitó 6.000 euros de indemnización por los daños morales ocasionados. El abogado de la procesada, José Luis Navas García, pidió su absolución.