La agresión se produjo la madrugada del 1 de noviembre de 2015. El perjudicado se encontraba en un bar de copas del Passeig Marítim de Palma. | Youtube: Julio Bastida

TW
15

Un año de cárcel para cada uno de los cuatro acusados de apalizar a un policía fuera de servicio en las inmediaciones de Porto Pi. Este es el acuerdo de confirmidad al que han llegado las partes en la vista celebrada este martes en el juzgado de lo Penal número 7 de Palma.

Los hechos se remontan a la noche del 1 de noviembre de 2015. Los procesados y el agente policial coincidieron en un conocido bar de copas del Paseo Marítimo. Ellos y otros tantos jóvenes celebraban Halloween, pero algo se truncó en el interior del establecimiento y víctima y agresores tuvieron un encontronazo.

Persecución

Noticias relacionadas

El incidente dentro del local no quedó ahí. Los cuatro condenados, según recoge la Fiscalía, persiguieron al policía por el Paseo Marítimo golpeándole a medida que iban avanzando en su camino. En Porto Pi lo neutralizaron y siguieron propinándole violentas patadas, golpes y puñetazos.

Todo esto quedó registrado por una cámara de seguridad de la zona. En un momento dado, la víctima intentó identificarse como agente policial, pero los agresores le arrebataron la placa y aprovecharon para hacerse con su teléfono móvil. Con su terminal llamaron a emergencias al darse cuenta de la gravedad de las heridas, poco antes de huir del lugar.

El Ministerio Público, que solicitaba en un principio ocho años de cárcel para cada uno de los acusados, tuvo en cuenta el atenuante de reparación del daño. Los procesados abonaron antes del juicio 15.000 euros a la víctima por las lesiones. Aún le deben otros 5.000. La pena de prisión quedó suspendida durante tres años.