El Fiat Stilo del sospechoso volcó y colisionó contra el coche patrulla de la Guardia Civil. | Alejandro Sepúlveda

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La madrugada de robos y asaltos de un toxicómano en Inca, Moscari y Campanet acabó violentamente cuando intentó huir de la Guardia Civil a bordo de un coche y realizó un trompo temerario, que lo propulsó contra el vehículo patrulla. A pesar de la aparatosidad del accidente, ni los funcionarios ni él resultaron heridos.

El joven, residente en Alcúdia, es natural de Córdoba. De madrugada entró en un estanco de Moscari, tras forzar uno de los accesos, y en el interior buscó dinero en efectivo. Después se marchó a Inca, donde robó en otro comercio y finalmente llegó a Campanet, donde eligió un bar y una clínica dental para seguir con su noche de saqueos.

Eran aproximadamente las cinco y media de la madrugada cuando un vecino reparó en el sospechoso saliendo de uno de los locales que acababa de asaltar, y se puso en contacto con la Guardia Civil. Una patrulla de sa Pobla se desplazó rápidamente hasta Moscari, pero el delincuente en lugar de tomar el desvío hacia la autopista de Inca, que era lo previsible, cambió de opinión y se dirigió hacia Campanet por una carretera interior. Allí, casualmente, se topó con una patrulla benemérita del cuartel de Inca que realizaba labores de vigilancia y que le dio el alta porque conducía de forma temeraria. El Fiat Stilo del sospechoso realizó una arriesgada maniobra para girar sobre sí mismo, pero el trompo le salió mal y perdió el control, estrellándose contra el coche de los agentes. Quedó volcado, pero aún así el conductor no se dio por vencido. Consiguió salir fuera del habitáculo en cuestión de segundos y escapó corriendo. Sin embargo, los funcionarios corrieron tras él y finalmente lo interceptaron y detuvieron.