Monique Tenant, junto a su hijo, a su llegada al aeropuerto de Son Sant Joan. | Alejandro Sepulveda Soler

TW
0

Monique Tennant, hermana de la monitora británica desaparecida el pasado 8 de octubre de 2007, regresó este martes a Mallorca para pedir que se reabra el caso: «Hay muchas cosas por mirar todavía».

Cuando se cumplen siete años de la desaparición de la monitora británica, que era sargento de la RAF (Royal Air Force), la familia de Jacqueline sostiene que no se apuraron todas las líneas de investigación en su día. Monique se reunirá este miércoles con el alférez Palomo en la Comandancia de la Guardia Civil de Son Rapinya, para pedir a los investigadores que no se olviden de Jacqueline. «Nosotros, la familia, barajamos otras posibilidades además de la del accidente. Había un hombre sospechoso, un jefe de mi hermana, que creemos que no fue investigado lo suficiente».

Noticias relacionadas

La familia de la monitora desaparecida se refiere a uno de los jefes de Jacqueline, que también era británico, y que supuestamente intentó tener una aventura con ella. El hombre fue rechazado y el 8 de octubre fue la última persona que habló con Jacqueline por el teléfono móvil. La monitora, que trabajaba en un hotel de Can Picafort, tenía libre ese día y cogió un bus para dirigirse a una zona de montaña indeterminada.

Esa fue la última vez que se supo algo de la ex militar británica. Su desaparición coincidió con la de Margalida Bestard y algunos allegados a Jacqueline sostienen que los investigadores se centraron más en ese caso y dejaron un poco de lado el de Jacqueline, que supuestamente era un accidente de montaña.