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Dos turistas checas que descansaban en la playa de Palmanova encontraron el pasado lunes una barra de hachís de más de un kilo de peso en la orilla, y ante la sorpresa de que se trataba de droga, la entregaron a la Policía.

El caso ocurrió al atardecer, cuando una dotación de la Policía Local de Calvià patrullaba por el Paseo del Mar, y Hana K. y Nikola R., de 66 y 22 años respectivamente, requirieron asistencia.

Las dos mujeres checas relataron a la Policía Local que aquella barra de hachís compacta y envuelta en cinta de embalar, que una vez examinada tenía 19 centímetros de longitud y que pesaba 1,080 gramos, la habían descubierto moviéndose al vaivén de las olas.

La curiosidad, según manifestaron, motivó que las dos turistas abrieran el pequeño paquete y tras romper un pedazo de la barra sospecharon que se trataba de alguna droga, por lo que decidieron entregarlo a la Policía.