La Guardia Civil montó un amplio dispositivo de vigilancia y control en Punta Ballena. | Michel's

TW
74

Otra noche loca en Punta Ballena, en Calvià. Un total de diez detenidos, una agresión sexual, otro caso de abusos sexuales, agresiones, peleas, numerosos heridos que precisaron ser atendidos médicamente e incluso un atentado contra agentes de la autoridad es el balance de 24 horas de sexo, alcohol y drogas.

El reloj marcaba las cuatro de la madrugada cuando varios agentes de la Guardia Civil que estaban realizando un dispositivo de paisano en el interior de la playa se percataron de la presencia de un grupo de cuatro hooligans, de gran corpulencia, que se dedicaban a pegar a la gente que se cruzaba en su camino sin ningún motivo aparente y sin que hubiese provocación alguna. De hecho, varias de las víctimas acabaron en centros médicos.

Enfrentamientos

Rápidamente, los agentes se identificaron y trataron de calmar los ánimos. Lejos de desistir de su comportamiento violento y agresivo, los británicos se encararon a los efectivos policiales y huyeron hasta Punta Ballena. Una vez allí, comenzó una auténtica batalla campal amparada en el ‘efecto contagio’. Es decir, compatriotas que se sumaron al lanzamiento de sillas, botellas y mobiliario urbano. Uno de los agentes resultó herido al ser golpeado en la cabeza. El funcionario precisó varios puntos de sutura, pero no fue necesario su ingreso en ningún centro hospitalario.

Tras conseguir reducirlos, los agentes de la Benemérita en colaboración con los porteros de locales de ocio procedieron al arresto de los cuatro hooligans.

Por otra parte, en la misma madrugada de ayer hay que contabilizar varias detenciones más. Concretamente, la más destacada se produjo cuando, supuestamente, un ciudadano pakistaní agredió sexualmente a una joven. Del mismo modo, otro varón también resultó detenido por agentes de la Guardia Civil de Palmanova acusado de supuestos abusos sexuales sobre otra turista. Las dos víctimas presentaron sendas denuncias.

A todo ello, también hay que añadir numerosos detenidos por robos con fuerza y robos con violencia. Una noche loca donde la Guardia Civil tuvo que multiplicarse para hacer frente a todas las incidencias.