Las imágenes, colgadas en Youtube, muestran la avalancha de gente que se agolpó en una de las salidas del Madrid Arena. | Youtube

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Tres chicas de 18 años murieron en la madrugada del jueves y otras dos se encuentran en estado crítico al verse envueltas en una avalancha provocada por el lanzamiento de una bengala durante una fiesta de Halloween que se celebraba en el recinto Madrid Arena de la Casa de Campo. La empresa organizadora del Thriller Music Park, Diviertt S. L., confirmó que la bengala fue lanzada en uno de los nueve vomitorios de acceso al recinto, lo que provocó el pánico y la consiguiente «estampida».

Petardos

De acuerdo con la Jefatura Superior de Policía, además de una bengala parece que se tiraron varios petardos, cuyas detonaciones pudieron hacer creer a los asistentes que se trataba de disparos.

El vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva, explicó que la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos había alquilado las instalaciones para la fiesta, que, según subrayó, cumplía todos los requisitos legales y técnicos para su celebración. Villanueva precisó que, a tenor de la información facilitada por la empresa, se vendieron 9.650 entradas de las 10.600 disponibles, y añadió que el Ayuntamiento abrirá una investigación para esclarecer los hechos.

También la Policía ha abierto una investigación, mientras que de las diligencias se ha hecho cargo el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, tras proceder al levantamiento de los cadáveres.

Víctimas

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Las tres fallecidas son Katia Esteban Casielles, nacida el 4 de octubre de 1994 en Madrid; Rocío Oña Pineda, nacida el 14 de julio de 1994 en Madrid, y Cristina Arce de la Fuente, nacida el 13 de marzo de 1994.

Las dos heridas seguían ayer noche hospitalizadas en estado crítico; María Teresa Alonso, en la Fundación Jiménez Díaz, y una menor de 17 años que ha tenido que ser identificada por uno de sus hermanos, ya que sus padres se encuentran estos días fuera de Madrid, en el Doce de Octubre.

Llamadas

Fuentes de la investigación precisaron que la Policía comenzó a recibir llamadas procedentes del interior del recinto hacia las 4.30 horas, alertando de una avalancha en el local.

Al llegar al lugar, los agentes comprobaron que alguien había lanzado una bengala en un pasillo que comunica la pista con las escaleras de acceso a una planta superior, y debido a la estampida producida a continuación se produjeron tres víctimas mortales por aplastamiento y dos heridas muy graves.

La Policía procedió entonces a desalojar «con total normalidad, aunque muy lentamente» el Madrid Arena, que no quedó totalmente vacío hasta las 6:50 horas.