Agentes de la Guardia Civil de la Policía Local de Selva tuvieron que gestionar la salida de vía de un autobús turístico en la carretera de Lluc y los problemas generados por la misma.
Sobre las 11.15 horas del sábado, varias llamadas alertaban a los equipos de emergencia de que un autobús cargado de turistas al tomar una curva de la carretera de Lluc, en el término municipal de Selva, por causas que se desconocen, pero que están siendo investigadas, se salió de la vía quedando parte de sus ruedas en el interior de una cuneta.
Durante los primeros momentos se vivieron escenas de cierto nerviosismo dado que se trata de una carretera de subida a la zona montañosa y con grandes acantilados y desniveles.
Rápidamente, se desplazó hasta el lugar del suceso varias dotaciones de la Agrupación del Sector de Tráfico de la Guardia Civil y varios agentes de la Policía Local de Selva.
La primera de las decisiones policiales fue la de cortar la subida de vehículos, a la altura de Caimari, y desviar a los mismos por rutas alternativas, es decir, por Pollença o Sóller.
Todo apunta a que el conductor del autobús no se abrió lo suficiente para tomar la curva y que el vehículo perdió el control y quedó anclado en una de las cunetas.
A pesar de los esfuerzos por parte del conductor y de otros colegas de profesión que se interesaron en prestarle su ayuda, fue imposible sacarlo de la cuneta y se requirió la presencia de una grúa.
El principal problema que generó el accidente fue que el autobús bloqueó por completo la subida y bajada de vehículos que transitaban en ese momento por la carretera. De hecho, se produjeron grandes retenciones dado que se trata de una hora punta en la subida y bajada de personas del monasterio.
Afortunadamente, el incidente fue gestionado por la Guardia Civil y Policía Local de Selva, con suma eficiencia y, en menos de una hora, ya se había desplazado una grúa y con ayuda de un gato hidráulico se consiguió despejar la vía.
El tráfico fue regulado y, minutos más tarde, se recobró la normalidad de la carretera.
2 comentarios
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¡Menos mal que no fue en el Coll de Soller! Seguro que la concesionaria del tunel habría denunciado al chofer por estar compinchado con el movimiento '#novullpagar' por bloquear el paso. Eso les hubiese obligado a abrir las barreras a todos los vehiculos.
"Agentes de la Guardia Civil de la Policía Local de Selva" toma ya, creando cuerpos de policía nuevos... Se luce Sr. periodista de sucesos. Esta carretera habría que limitarla, no puede soportar en nivel de tráfico actual, por el bien de Mallorca y sus habitantes.