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El Grupo de Homicidios de la Policía Judicial de la Guardia Civil ya tiene a dos sospechosos del posible crimen y desaparición de Miguel Pellicer Sanmartí, el vecino de Algaida del que no se tienen noticias desde el pasado 26 de julio. El caso, en las próximas semanas, podría dar un giro definitivo.

El hombre, de 65 años de edad, vivía solo en una finca de Algaida, a la que se había trasladado hacía una década.

Vida solitaria

Miguel mantenía pocos contactos con su familia y tampoco hacía demasiada vida social en el pueblo. A finales de julio, se denunció en el cuartel de la Guardia Civil de Llucmajor su desaparición y el Grupo de Homicidios vio claro, desde el principio, que se trataba de una ausencia forzada. La inspección ocular que los agentes hicieron en la finca arrojó otras pistas muy interesantes, que al final han dado sus frutos. Miguel Pellicer dejó en la casa su DNI, dinero, las cartillas bancarias, su ropa y todo tipo de enseres personales, lo que evidenciaba que no se había marchado de forma voluntaria.

En las últimas semanas, los investigadores han ido estrechando el cerco y por fin tienen ya a los dos sospechosos del posible asesinato y desaparición del vecino de Algaida. Estos dos hombres todavía no han sido detenidos, pero el caso dará un giro en breve.

También parece ser que hay una mujer que deberá declarar ante los agentes, aunque su presunto grado de implicación en los hechos no es tan grave. Un juzgado de Manacor instruye las diligencias sobre la misteriosa desaparición de Miguel Pellicer Sanmartí.