Imagen de archicvo de Josefa Moreno 'La Parrala'. | Alejandro Sepúlveda

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El juicio por el crimen de ‘La Parrala' quedó ayer resuelto al alcanzarse un acuerdo entre todas las partes. José Ortega Santiago, alias ‘El Farru', de 33 años, y su hermano Juan, de 40, reconocieron haber disparado a la víctima en el transcurso de una discusión por una deuda de narcotráfico, mientras que su madre, Trinidad Santiago Porras, de 55 años, admitió que sus hijos empezaron a disparar a ‘La Parrala' por indicación suya.
Al reconocer su participación en los hechos, la fiscal rebajó las penas de prisión que pedía en su escrito inicial y finalmente las condenas solicitadas, que fueron aceptadas por los tres acusados, fueron de 7,5 años de prisión para ‘El Farru', seis años de cárcel para su hermano Juan y tres para Trinidad. Para los otros cinco procesados, la fiscal retiró los cargos y por tanto han quedado absueltos. Los procesados firmaron un nuevo escrito de acusación conjunto, aceptando las nuevas penas propuestas por la acusación, que después fue ratificado ante el magistrado presidente del tribunal. Por tanto, el juicio por el crimen de ‘La Parrala', ocurrido en la noche del 7 de septiembre de 2009, quedó ayer resuelto.
Los tres condenados y otros cinco familiares, pertenecientes al ‘Clan de los Peludos' fueron al poblado de Son Banya esa noche con la intención de cobrar sí o sí una deuda de tres millones de pesetas a ‘La Parrala' por una venta de sustancias estupefacientes. La reclamación de la deuda era a ‘La Paca', pero como ésta se encontraba cumpliendo condena en prisión se centró en ‘La Parrala'.
Deuda
Trinidad y ‘La Parrala' iniciaron una discusión en la que acabaron interviniendo otras personas, entre ellas José y Juan Ortega Santiago. Estos dos últimos, a instancias de su madre, realizaron varios disparos a ‘La Parrala'. Uno de los proyectiles le alcanzó en la cabeza y le provocó la muerte.
Después los procesados huyeron, pero fueron detenidos.
La acusación argumenta la rebaja de la petición de condena para ‘El Farru' y su hermano en que ‘La Parrala' hizo un gesto con la mano y dijo que tenía un arma (aunque no llevaba ninguna), por lo que tuvo una participación activa y no estuvo pasiva. Esta situación provocó que los dos hermanos creyesen que ella iba a utilizar un arma y ellos sacaron las suyas y le dispararon. En este sentido se les aplica la eximente incompleta de legítima defensa y por ello las penas son finalmente bastante inferiores a las que se solicitaban en principio.