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«Yo soy un gran aficionado del Real Madrid. Mi hermana Lucía escribió una carta a una conocida emisora de radio nacional y tratar de conseguir que Iker Casillas me diera una camiseta firmada. El capitán madridista me envió su camiseta y entré en directo por la radio. Habían pasado cuatro meses de mi accidente, pero yo nunca quise preguntar qué tenía. Fue entonces cuando Iker comentó que era tetrápléjico y me afectó mucho», relata visiblemente emocionado Iván. El joven palmesano no pierde la ilusión y destaca que «tengo que dar gracias cada día por respirar porque, a veces, los pequeños detalles no los tenemos en cuenta».