La mujer fue detenida por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. | ALEX SEPULVEDA

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Una mujer de 52 años de edad se conformó ayer con una pena de un año de prisión por llevarse a su hijo de un centro de menores del Consell después de que al menor se le hubiera declarado en desamparo. La madre aprovechó que tenía permiso para realizar una visita al niño y, el 11 de enero de 2011 se lo llevó consigo con la intención de no devolverlo. La mujer tuvo al menor bajo su cuidado durante más de veinte días hasta que fue detenida por agentes del Cuerpo Nacional de Policía que devolvieron al menor al centro en el que se encontraba.

La madre se encontraba en situación irregular en España y tenía antecedentes penales. El menor sufre además una grave minusvalía. Por estos motivos, la Administración resolvió en diciembre de 2009 una declaración de desamparo del menor. De esta manera, asumió su guarda y custodia y el niño pasó a estar cuidado en un centro público de Palma.

La Fiscalía solicitaba en sus conclusiones iniciales una pena de dos años de prisión a sustituir por la expulsión del territorio nacional y la privación de la patria potestad durante cinco años. Finalmente, el letrado de la defensa, Miquel Àngel Cardell y la Fiscalía alcanzaron un acuerdo que elimina cualquier mención a la patria potestad. Además, la pena de un año de prisión será sustituida por otra de un año de trabajos en beneficio de la comunidad.