Los agentes serán juzgados en enero en la Audiencia Provincial. | ALEJANDRO SEPULVEDA - MALLORCA

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La Fiscalía pide condenas de ocho y seis años de prisión para dos agentes de la Guardia Civil por narcotráfico. Ambos fueron detenidos junto a otros cuatro compañeros en abril de 2009 por distribuir cocaína en s'Arenal. El ministerio público no formuló acusación contra los demás al entender que eran consumidores de cocaína y que se limitaban a comprársela a los dos acusados. De esta manera no vulneraban su obligación de denunciar delitos.

La investigación contra los agentes se inició en 2009 durante unas pesquisas sobre la entrada de droga en Son Sant Joan. Al detectarse que dos de los implicados eran guardias, Asuntos Internos se hizo cargo del caso e inició una serie de seguimientos y pinchazos a los dos agentes acusados ahora. A partir de ahí se llegó a otras tres personas, dos de ellas de origen nigeriano y se puso en marcha una operación. La Guardia Civil registró cuatro viviendas y un local comercial. En la casa de uno de los agentes acusados, en s'Arenal se encontraron más de 300 gramos de cocaína y 7.500 euros en efectivo. En el domicilio del otro guardia acusado, Asuntos Internos encontró cerca de 6.000 euros en efectivo que, según la Fiscalía provienen de la venta de drogas a terceros.

Son Gotleu

La operación continuó en viviendas de Son Gotleu y en un comercio. En todos estos lugares se encontró dinero en efectivo y pequeñas cantidades de droga.

Los responsables de la red empleaban a nigerianos para introducir la droga en sus cuerpos en Mallorca a través del aeropuerto. Después, los llevaban a un piso franco, donde recogían la cocaína para, posteriormente, encargarse de su distribución y su venta al por menor. La causa será juzgada en enero por la Audiencia Provincial de Palma y se espera que varios de los acusados reconozcan los hechos y se puedan conformar. La Fiscalía imputa a los seis acusados un delito contra la salud pública y pide ocho años para uno de los guardias civiles y otros dos acusados. Para este agente solicita además una multa de 18.000 euros. Para el otro guardia y los otros dos acusados, la petición del ministerio público es de seis años de reclusión y también multas elevadas. En su escrito de acusación, el fiscal anti droga, Adrián Salazar, pide que se de traslado a la Guardia Civil del archivo de la causa contra cuatro agentes, para que sea la Benemérita quien adopte medidas disciplinarias contra ellos por el consumo de estupefacientes.