Una inmigrante subsahariana con varias detenciones previas protagonizó ayer uno de los incidentes más graves producidos en el juzgado de guardia de Palma. La mujer intentó agredir a la magistrada Carmen Abrines y causó varias heridas a una funcionaria del Juzgado de Instrucción número 5 de Palma, ayer en funciones de guardia. La reacción violenta de la mujer se produjo, según fuentes judiciales, cuando la magistrada le comunicó que quedaba en libertad.
La mujer había sido detenida por la Policía Nacional por un delito de daños, después de que hubiera roto los retrovisores de varios vehículos en Palma. Ayer por la mañana, fue trasladada a los Juzgados de Vía Alemania para pasar a disposición judicial. Allí fue interrogada por la magistrada Abrines, titular del Juzgado de Instrucción número 10 que ayer se encontraba cubriendo la guardia con el 5. El interrogatorio, celebrado en uno de los despachos de las dependencias de guardia, transcurrió de forma normal hasta que la juez comunicó a la detenida su intención de dejarla en libertad. Entonces, ésta reaccionó con una extrema violencia, agarró la pantalla del ordenador que hay en esa sala y la arrojó contra la juez y la funcionaria que la habían interrogado. A continuación arrancó el asiento de madera de una silla y también lo lanzó contra la juez y la funcionaria. Uno de los objetos alcanzó a la trabajadora judicial en el costado y le causó un hematoma.
Al oír el estruendo causado por el altercado, los servicios de seguridad de Vía Alemania intervinieron y redujeron a la agresora antes de que continuara su ataque. La mujer fue llevada de vuelta a la Jefatura del Cuerpo Nacional de Policía y en los próximos días volverá a pasar a disposición judicial. La agresora ha sido detenida en varias ocasiones por otros delitos.
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