La Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias de la muerte de un vecino de Campos de 82 años, que apareció calcinado en su coche.
El hallazgo lo llevó a cabo su nieto, que acudió a una finca del camí del Palmer y se encontró el cuerpo calcinado. La familia dio aviso a los equipos de emergencia y la Benemérita se hizo cargo de la investigación.
El centro de emergencias del 112 informó del hallazgo y cuando los medios de comunicación se acercaron a la finca, se vivieron momentos de tensión con la familia. Un miembro de la Guardia Civil de paisano, incomprensiblemente, acusó a los periodistas de ser unos «morbosos».
El juzgado de guardia de Manacor también fue informado de la muerte accidental de Magín Fullana y una comisión judicial se trasladó a la finca, ubicada en el kilómetro 5 de la carretera de Campos a la Colònia de Sant Jordi. La hipótesis principal apunta a que el octogenario, que sufría diabetes y cuya salud era un tanto precaria, quedó atrapado en el vehículo cuando se inició un fuego por un fallo mecánico.
El forense también examinó los restos del vecino de Campos, y no se descubrió ningún indicio que apunte a una muerte violenta. La noticia del fallecimiento se propagó ayer por Campos y causó una gran consternación entre los vecinos. Hoy está previsto que se le efectúe la autopsia al octogenario carbonizado.
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