Dolores Sánchez es una vecina del municipio de Andratx que desea denunciar públicamente la agresión que sufrió el pasado miércoles en manos de un comerciante.
«Yo entré al establecimiento sobre las doce y media del mediodía y pedí dos paquetes de tabaco. El dependiente, con muy malos modos, me dijo que no quería calderilla. Yo saqué un billete de 20 euros, le pague y el propietario del local me dio el cambio, pero no los paquetes de tabaco. Al reclamarle el género que había comprado el varón se puso muy alterado y comenzó a gritarme que me fuese de allí. Yo no daba crédito a lo que me estaba pasando, pero aún fue a peor. Al decirle que llamase a la policía, que me registrara y comprobaría que yo no tenía el tabaco el hombre salió del mostrador, me cogió del cuello por detrás y me tiró al suelo. Yo perdí por unos instantes el conocimiento y al recuperarlo me di cuenta que me estaban arrastrando hasta la puerta. Una vez allí, el propietario del local bajó la barrera metálica, hasta en dos ocasiones, sobre mis costillas y cadera causándome un dolor tremendo», relata muy afectada Dolores.
«Lo peor de todo fue que durante todo el tiempo que duró la agresión, a unos diez metros, había una parada de taxis y un montón de albañiles de una obra cercana y nadie, absolutamente nadie, me auxilió.
Así como pude me arrastré hasta la parada de taxi y uno de ellos llamó por teléfono a la policía. Acto seguido me acompañaron hasta el centro médico donde me tuvieron que atender aquejada de una grave crisis de ansiedad. Posteriormente acudió al cuartel de la Guardia Civil para poner la denuncia», finaliza.
Los hechos están siendo investigados por agentes de la Benemérita.
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