El motorista de 36 años, cuyo cadáver yace sobre la calzada, fue arrollado por un conductor que se saltó un semáforo en rojo y dio positivo en la prueba de alcoholemia. Foto: VASIL VASILEV

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JULIO BASTIDA Eran las 23.56 horas del pasado miércoles, cuando un joven de 36 años, Sebastià Pascual, perdía la vida en un trágico accidente de tráfico en la plaza des Fortí de Palma.

El motorista conducía una motocicleta marca Honda VFR de 750 centímetros cúbicos y circulaba por Vía Portugal dirección a la calle Ramón y Cajal. En esos instantes, y según las primeras investigaciones policiales, el vehículo implicado en el siniestro circulaba por la calle Rafael Rodríguez Méndez hacía Vía Alemania y según relatan algunos testigos presenciales, el conductor del turismo, se saltó un semáforo en rojo e impactó con la motocicleta causando la muerte del motorista en el acto.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron rápidamente dotaciones de la Policía Local de Palma y una UVI móvil, los sanitarios no pudieron hacer nada para salvar la vida del joven.

Los agentes desplazados hasta el lugar del accidente, realizaron el correspondiente test de alcoholemia al conductor del turismo, que dio positivo en una primera prueba con 0'64 mlgr/l y en segunda instancia en la de contraste marcó 0'68 mlgr/l. El conductor, que conducía bajo los efectos del alcohol, fue detenido, y trasladado hasta las dependencias municipales en el cuartel de San Fernando, donde aún permanece en los calabozos. La unidad nocturna descartó tomarle declaración, dado que el detenido no se encontraba en las condiciones óptimas y necesarias para ofrecer su versión de los hechos. El acusado se pasó la primera noche llorando en los calabozos.

Ante el juez
El arrestado se enfrenta a los cargos de homicidio imprudente y un delito contra la seguridad vial.