La Guardia Civil inspeccionó ayer dos pozos de 15 metros de profundidad en Llucmajor y una amplia zona de Portals Vells. Foto: A. SEPÚLVEDA

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La Guardia Civil se desplegó ayer por la zona de s'Arenal de Llucmajor en busca de Margalida Bestard, desaparecida hace dos meses, y Àngeles Arroyo, de quien no se tienen noticias desde hace 11 años. Un hombre que reside en s'Arenal fue investigado, e incluso llegó a estar en prisión, por la desaparición de Àngeles, y también es sospechoso de haber atacado a Margalida.

El dispositivo de ayer tuvo dos frentes: el vertedero de la urbanización Bellavista, donde los agentes realizaron una búsqueda con la ayuda de perros; y la calle Salud. A la altura del número 33 de esta vía hay un bloque de diez alturas. El sospechoso de la desaparición de las dos mujeres era propietario de un piso en este edificio y lo vendió hace tres años. Frente a la entrada del edificio hay un pozo, de un metro y medio de ancho por unos 15 de profundidad, y en un cuarto del interior del garaje hay otro pozo, de las mismas dimensiones. Este segundo pozo se había tapiado a unos dos metros de profundidad y encima se habían arrojado escombros.

Los dos pozos contenían agua y fueron vaciados. Después, un agente descendió hasta el suelo de cada pozo con cuerdas pero el resultado de la búsqueda fue negativo.