Una supuesta explosión de un barco en la bahía de Pollença movilizó en el mediodía de ayer a la Guardia Civil. Al final se comprobó que se trataba de un simulacro programado del SAR.
Un vecino del Port de Pollença se puso en contacto con el centro de emergencias del 112 y alertó de que una embarcación acababa de explotar, por lo que la Comandancia de Palma fue informada de lo ocurrido. Rápidamente se movilizaron a las patrullas del cuartel de Inca y de Pollença, para que se desplazaran a la bahía y confirmaran la información. Minutos después se recibió otra llamada y se indicó que no había constancia de que hubiera personas dentro de la nave en llamas.
Al final, se aclaró el embrollo. El SAR había montado unos ejercicios en los que participaban un Aviocar, un avión Focker y una lancha. El simulacro consistía en un «lanzamiento en cadena» y había sido programado y avisado con la debida antelación. De hecho, se suele realizar cada martes. Sin embargo, ni en la Comandancia ni en el 112 tenían constancia de las maniobras del 801 Escuadrón.
La confusión duró un cuarto de hora y en cuanto la Benemérita confirmó que se trataba de una falsa alarma y que no había nadie herido se desactivó el dispositivo de emergencia.
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