La presidenta de UM, que ayer celebró la tradicional copa de Navidad con los medios de comunicación, insistió en apelar a la prudencia para que el PP no apruebe la ley de capitalidad, especialmente en unos momentos «en que todo el urbanismo está bajo sospecha». Para Maria Antònia Munar, no es el mejor momento para que una ley dote a Palma de una autonomía absoluta en materia urbanística, de forma que la ciudad pueda hacer un urbanismo «ajeno al resto de Mallorca y a sus necesidades reales».
La ley de capitalidad, un proyecto presentado por la Conselleria d'Interior, que dirige el actual secretario general del PP, José María Rodríguez, deja al Consell de Mallorca sin ninguna competencia para supervisar el urbanismo que se desarrolle en Palma. Es decir, evitará a Palma someterse al control supramunicipal del Consell de Mallorca, cosa que sí deben hacer el resto de municipios de las Isla, además de los de Eivissa y Menorca con sus respectivas instituciones insulares.
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