TW
0

EFE-CANCÚN
La embajadora de España en México, Cristina Barrios, se mostró ayer confiada en que la situación legal de la turista arrestada al final de su luna de miel en Cancún se esclarezca «muy pronto», y consideró «extrañísimo» el caso.

Un juzgado federal decidió anteayer que la española Ana María Ríos Bemposta, de 26 años, permaneciera encarcelada sin derecho a fianza después de que el pasado domingo se encontraran en su equipaje un detonador y varios cartuchos percutidos, según el informe de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía)

«Esperamos que dentro de muy poco se pueda dilucidar el caso», dijo Barrios, al explicar que «todo el mundo tiene la mejor voluntad y el interés en que el tema se solucione» lo antes posible.

«No nos explicamos por qué estaban los casquillos» en la maleta, señaló la embajadora, quien considera que el caso es «muy desgraciado y aislado».

Fuentes diplomáticas españolas sostienen que la joven carece de antecedentes penales y temen que todo sea resultado de una manipulación del equipaje de la recién casada, que no lo tuvo bajo control durante todo el tiempo antes del embarque.

Tras llegar, el miércoles por la tarde, al balneario del Caribe mexicano, la madre de Ríos Bemposta visitó a su hija, quien está en la cárcel municipal de la ciudad separada de los reos ordinarios.

El cónsul honorario de España en Cancún, Javier Marañón, indicó que la madre de la joven ha podido dormir con ella en la cárcel, un privilegio que se logró gracias a un acuerdo con el gobernador de Quintana Roo y con el alcalde de la ciudad a quienes agradeció las atenciones en el caso.