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EMILIO LÓPEZ VERDÚ
Cuando la evidencia aprieta, el ingenio se agudiza. Esto debieron pensar los seis 'narcos' detenidos la semana pasada en La Soledat a la hora de declarar ante el juez, al que colmaron de todo un repertorio de maquinaciones. A través de las más disparatadas explicaciones, justificaron el hallazgo de cocaína, balanzas de precisión y unas normas de seguridad propias de un grupo paramilitar.

Las declaraciones se efectuaron el pasado viernes en Vía Alemania. Todos los detenidos menos uno son familiares de «El Pablo», el mayor narcotraficante de la Isla, y varios de ellos ya han sido condenados por delitos contra la salud pública.

Así, cuando el juez preguntó a uno de los detenidos por qué tenía una balanza de precisión en su casa, éste le contestó «que era para pesar a su hermana, porque está a dieta». Después le tocó declarar a la rolliza hermana, quien corroboró la versión de su familiar.

Los agentes también hallaron cocaína en la taza de un retrete, síntoma que suele indicar que los inquilinos, a la llegada de la policía, arrojan la droga a todo correr por el excusado. Sin embargo, un detenido explicó que la presencia de droga se debía a que «estaban organizando una fiesta» (en el baño).

También fue curiosa la explicación sobre los envoltorios de plástico utilizados para meter pequeñas cantidades de droga, y que según los detenidos estaban destinados a «envolver bocadillos».