La víctima fue trasladada del PAC de Inca a Son Dureta. Foto: UH INCA

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JAVIER JIMÉNEZ-PEP MATAS
Una mujer maltratada estuvo a punto de morir degollada ayer tarde por su marido en Inca. Tamara, una norteamericana de 40 años, fue atacada con un cuchillo por Fernando Carballo, uruguayo de 28. El agresor le ocasionó un gran corte en el cuello, aunque no consiguió su objetivo de matarla. Luego intentó suicidarse, también en vano. El matrimonio, que tiene dos hijos de corta edad que estaban en la casa cuando se produjo el intento de asesinato, llevaba unos tres meses viviendo en una planta baja de la calle Fray Antoni Torrens, a la altura del número 64. Este verano ella estuvo ingresada en un centro de acogida para mujeres maltratadas y su marido fue denunciado en septiembre por violencia doméstica. Ayer tarde, a eso de las 19.00 horas, la pareja discutió. Según parece, él volvió a agredirla y luego empuñó un cuchillo y le cortó el cuello, con la intención de degollarla. A continuación, mientras ella se desangraba, el joven empezó a apuñalarse en las muñecas, aunque no llegó a cortarse las venas. Tamara llegó tambaleándose a la calle, en estado grave, y sus vecinos corrieron a auxiliarla. Le taponaron la herida para frenar la hemorragia y la Policía Local fue alertada de inmediato. Una patrulla llegó a esa calle antes que la ambulancia del 061, y se llevó a la herida hasta el PAC (Punto de Asistencia Continuada), donde los médicos la auxiliaron. Fernando Carballo, también ensangrentado, fue atendido en el mismo centro de sus lesiones, que no eran de importancia. Tamara, finalmente, fue trasladada hasta Son Dureta, donde confirmaron que la puñalada le había afectado la carótida. Sin embargo, al cierre de esta edición no se temía por su vida. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación y el acusado fue trasladado de noche al cuartel de la localidad, para ser interrogado. Los vecinos de la calle Fray Antoni Torrens se encontraban anoche muy afectados por el intento de asesinato y por las escenas que se habían sucedido después. Pocos, no obstante, tenían relación de amistad con Tamara o Fernando. Los Servicios Sociales del ayuntamiento de Inca se hicieron cargo de los hijos de la pareja, mientras la madre se recupera.