Tres chicas de entre 21 y 24 años salieron de marcha durante la
noche del miércoles al jueves por el Paseo Marítimo de Palma y
cogieron un taxi para regresar a su casa, pero el trayecto no fue
de lo más confortable. Según denunciaron las tres víctimas ante la
Policía Local, los hechos ocurrieron sobre las 04.55 horas de la
madrugada. Las chicas subieron a un taxi y le indicaron al
conductor su domicilio.
Al llegar a la altura de la Avenida Argentina, el taxista giró
hacia la misma. En ese momento, las tres jóvenes le pidieron por
qué no había seguido recto por la autopista, al ser más corto el
camino. Ante este comentario, el taxista les preguntó si le estaban
llamando estafador. Las chicas respondieron que eran de aquí y le
pidieron que parase para que se pudieran bajar.
Al parar, el taxista les pidió cinco euros, pero las jóvenes se
negaron a abonarlos. Cuando se disponían a bajar, el conductor
cerró el seguro de las puertas y emprendió la marcha con la
intención de llevarlas al lugar donde las había recogido. Como las
víctimas insistían en que parase para bajar, agarró a una de ellas
de un brazo. A pocos metros, en un semáforo en rojo, el taxista
bajó del vehículo y abrió las puertas. Las tres jóvenes salieron
del coche y en ese momento el conductor sacó un spray, les roció
los ojos y se marchó del lugar.
Las tres chicas pidieron ayuda a la policía, que realizó el
pertinente informe penal por detención ilegal y lesiones. Cuando
los agentes llegaron, las tres víctimas presentaban los ojos
enrojecidos e hinchados y se tuvieron que separar de ellas porque
el gas también les afectaba. Una ambulancia las trasladó a Son
Dureta, donde fueron atendidas de las lesiones.
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