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BARCELONA-EFE
El caso de los dos socavones del barrio barcelonés de El Carmel, provocados por las obras del metro y que han obligado a evacuar a más de mil personas, llegó ayer al Parlament de Catalunya con la comparecencia del conseller de Obres Públiques, Joaquim Nadal, quien dio explicaciones sobre lo sucedido. Nadal apuntó que hubo un «exceso de confianza» en el método austríaco de perforación de túneles y señaló que los corrimientos de tierras se podrían haber evitado. Nadal indicó también que hasta el momento se han inyectado 1.300 de los 16.000 metros cúbicos de hormigón previstos para sellar el túnel de maniobras de la línea 5 del metro en el Carmel.

Por otra parte, CiU y PPC pidieron ayer la dimisión del secretario de Comunicación de la Generalitat, Enric Marín, por su «voluntad desmedida de censura» en el seguimiento informativo del caso. Los responsables de CiU calificaron de «absolutamente indecente e irrespetuoso con los medios de comunicación» el protocolo de actuación para la cobertura informativa de la «crisis» del Carmel que se está elaborando ya que «impide a los medios hacer un seguimiento (informativo) libre».

La dimisión de Enric Marín se justifica, según Madí, por haber querido «manipular y censurar la información, no respetar la profesionalidad de los periodistas, imponer un control ante los medios propio de regímenes castristas». El portavoz del PPC, Francesc Vendrell, también pidió la dimisión de Marín por «haber ordenado restringir el acceso de los medios de comunicación a la zona afectada», un hecho «sin precedentes en la democracia española» y propia de «regímenes dictatoriales».