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Dos hermanos británicos de 12 y 15 años de edad tuvieron que ser ingresados el domingo por la noche en el hospital de Son Dureta al sufrir una intoxicación etílica. Los jóvenes y sus padres se hospedan en un hotel de Santa Ponça, donde están pasando las vacaciones de Navidad. Sobre las 02.00 horas del pasado domingo, los propios progenitores observaron el estado de los menores y tuvieron que avisar a empleados del hotel para que telefonearan al servicio de emergencias del 112. Una ambulancia del 061 los trasladó de inmediato a Son Dureta, donde quedaron ingresados toda la noche. El hospital ha emitido un parte judicial para informar del estado de los niños, ya que una intoxicación en estas edades resulta particularmente nociva.

La policía ya ha iniciado las correspondientes investigaciones para conocer más detalles sobre el caso. Al parecer, el padre de los menores se encontraba en estado ebrio la noche del domingo y no parecía ser consciente de la situación, por lo que se cree que los menores llegaron a emborracharse después de ir bebiéndose los «restos» de las copas que el propio padre iba dejando en distintos bares de Santa Ponça esa misma noche.

Tampoco descartan que los menores obtuvieran la bebida por su propia cuenta en algún establecimiento de la localidad. Tras permanecer toda la noche ingresados en el centro sanitario, los menores obtuvieron el alta médica ayer por la mañana. La familia tiene previsto abandonar la isla el próximo 31 de diciembre.