TW
0

En la edición del pasado sábado Ultima Hora informó de una denuncia que ha presentado la FSP/UGT contra el Ajuntament de Andratx, por lo que se considera son una serie de irregularidades en el cuartel de la Policía Local y deficiencias en asuntos relacionados con la seguridad de los funcionarios y las personas detenidas en los calabozos.

Ahora, el Ajuntament de Andratx responde a la denuncia, con un escrito que reproducimos íntegro: «El Ayuntamiento de Andratx recomienda a la Federación de Servicios Públicos de la UGT que se cerciore de lo que denuncia y que se instruya sobre la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL) antes de afirmar que la Policía Local no ha recibido formación alguna en materia de prevención de riesgos laborales. La LPRL exime a los policías locales del cumplimiento de sus postulados. A pesar de ello el 29 de enero de 2002 el Ayuntamiento adjudicó el servicio de prevención de riesgos laborales de todo su personal a la compañía Mutua Balear, por lo que sí existe un servicio de prevención concertado».

Con respecto a que las dependencias policiales no disponen de salidas de emergencia, «el cuartel tiene una superficie aproximada de 300 metros cuadrados en una sola planta y el acceso y evacuación se realiza por una puerta de doble hoja, lo que permite su desalojo en menos de quince segundos». Sobre la presencia de 70 motocicletas en el aparcamiento subterráneo, «dichos vehículos se han ido acumulando con el tiempo sin que el anterior responsable de la Policía Local incoara los expedientes que habrían de derivar en su subasta pública o devolución. En cualquier caso, el local reúne las condiciones de seguridad suficientes para albergar los ciclomotores sin que se ponga en peligro la integridad física de los agentes ni la de los detenidos. Casualmente, el que fuera sargento jefe de la Policía Local, está apartado del servicio por innumerables irregularidades en su gestión y tiene abierto un expediente en el que está representado por la UGT. En la inauguración del nuevo cuartel, en 1997, el sargento jefe era el mismo y fue el que dispuso los calabozos, quién ordenó que se acumularan los ciclomotores, quién durante estos siete años ha hecho dejación de responsabilidades al no emitir ni un solo escrito de queja o advertencia sobre las supuestas irregularidades que ahora denuncia UGT. Por último, el Ayuntamiento quiere informar que todas las instalaciones de Son Mas reúnen las condiciones y disponen de los elementos de seguridad que establece la normativa sobre prevención de riesgos laborales».