Condenados a pagar más de un millón de euros por estafas inmobiliarias

La instrucción del caso ha sido una de las más largas de los últimos años, puesto que la primera denuncia se presentó en marzo de 1991 a un juzgado de Instrucción, pero la causa no se remitió al juzgado de lo Penal hasta octubre de 2000. En la propia sentencia, de 87 páginas, el juez señala que la investigación de los hechos ha sido «densa y compleja».

El condenado sobre el que recaen la mayoría de los delitos es Damián M.S., director por entonces de la sociedad Dambel S.A. En mayo de 1988, este hombre compró una parcela situada en la avenida Picasso de Son Espanyolet a sus propietarios por 158.000 euros, apropiándose, a espaldas de la empresa que dirigía, de 48.000 euros de los pagos efectuados a los propietarios.

Un año más tarde simuló vender este mismo solar a su esposa, Rosa María C.D., otra de las implicadas. La operación tenía el propósito de obtener un crédito de 240.000 euros, que fue concedido y del que el acusado fue disponiendo para su exclusivo uso personal.

A partir de ese momento, Damián M.S. comenzó una serie de ventas simuladas del solar a varias empresas. La primera fue Picasso 90 S.A., con la que Dambel S.A. llegó a un acuerdo de compra por 994.000 euros. El inculpado se apropió de 90.000 euros que esta entidad pagó como señal.

Tras esta operación, Damián M.S. volvió a vender la propiedad a otras dos empresas. Además creó una sociedad ficticia denominada «Oficina Técnica de la Construcción S.L.» dirigida por otro de los inculpados, Pedro B.R., cuya única finalidad era interponerse en la transmisión de la parcela hasta el verdadero comprador. En todas estas operaciones, Damián M.S. obtuvo un beneficio en su patrimonio de 384.000 euros, estafando además el IVA a Hacienda.

Algunos meses más tarde, Damián M.S. y Pedro B.R. se apropiaron de otros 48.000 euros más procedentes de la venta de dos chalets en Cas Català.

El fallo condena a Damián M.S. a 20 meses de arresto mayor por cinco delitos de apropiación indebida y estafa y dos delitos contra la Hacienda Pública por no pagar los tributos del IRPF de 1990, imponiéndole una multa de 348.485 euros. En el orden civil, Damián M.S. deberá abonar 643.000 euros, más los intereses de 15 años, a los titulares de la parcela de Son Espanyolet, Hacienda Pública, la entidad Picasso 90 S.A., Dambel S.A., y un particular, mientras que otra acusada, Caridad C.D., deberá pagar 153.257 euros entre multas e indemnizaciones por delitos contra la Hacienda Pública.