Antonio Fernández Díaz, un empresario de Cala Major que fue
agredido supuestamente por el portero de un club de alterne de la
zona continúa ingresado en la UCI de Son Dureta en estado grave. Su
mujer, Clair Williams, explicó ayer a Ultima Horaque «Antonio está
sedado, le han cambiado el tratamiento y todavía estará cinco días
más en la UCI como mínimo si todo va bien». «Los médicos me han
dicho que ahora le realizan un tratamiento de hipotermia, que
consiste en bajar la temperatura corporal para que baje la presión
cerebral, porque el que le han hecho hasta ahora no ha funcionado
bien».
Antonio Fernández, de 43 años, que regenta una floristería, y un
amigo, estuvieron viendo un partido de fútbol el domingo por la
noche en un bar. Cuando acabó, los dos hombres decidieron ir a un
'table dance' próximo para tomar una copa pero, al parecer, el
portero les impidió la entrada porque Antonio iba en chándal. En
ese momento se entabló una discusión que acabó cuando otro empleado
del local «lo agredió brutalmente por la espalda», dijo Clair. La
víctima se desplomó y fue trasladada a Son Dureta, donde quedó
ingresada en estado muy grave.
En este sentido, su mujer indicó ayer: «Por la gravedad de la
herida es difícil creer que sólo le pegaron con la mano, el agresor
debió darle con una barra de hierro, un palo o algún objeto
contundente, no es normal y la persona que pegó a mi marido debe
estar en la cárcel o pagar por ello». Clair, que tiene una hija de
13 años y un hijo de 11, ha puesto el caso en manos «los abogados
porque es muy grave lo que pasó», también ha declarado ante la
policía, que abrió una investigación nada más tener conocimiento de
la agresión, al igual que el hombre que acompañaba a Juan cuando
fue agredido. El supuesto agresor, un boxeador, fue detenido por la
policía.
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