María Antonia Rodríguez, vecina de Son Gotleu, fue condenada a dos años por narcotráfico.

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La Embajada española en Ecuador ha iniciado los trámites para pedir la extradición del joven mallorquín que lleva casi un año y medio preso en una cárcel de Guayaquil (Ecuador), junto a su novia que también es palmesana. Manolo y María Antonia fueron condenados recientemente a cumplir ocho y dos años de prisión respectivamente y ahora las autoridades ecuatorianas han desestimado el recurso de apelación interpuesto por los abogados de ella.

Los casos de los dos mallorquines, que son pareja y todavía se ven cada jueves en la prisión, han tomado caminos distintos, sobre todo después de que los representantes legales en España de Manolo (el procurador Julián Montada y el abogado Jaume Gelabert) decidieran no recurrir la sentencia condenatoria contra su cliente. Pensaban que de esta manera había más posibilidades de obtener la extradición a España y de asegurar, por ende, que cumpliera el resto de la condena en una cárcel de nuestro país. Por contra, María Antonia Rodríguez sí recurrió los dos años de reclusión a los que había sido condenada, con la esperanza de que fuera revisada la sentencia y obtuviera la libertad definitiva.

El asunto, sin embargo, está dando un giro de 180 grados y además de denegarse su solicitud las autoridades judiciales de Guayaquil han reactivado la segunda acusación que imputaban a la pareja: la de asociación ilícita. En un principio, Manolo y María Antonia fueron encarcelados por un delito de narcotráfico, ya que les sorprendieron con un alijo de cocaína en el aeropuerto internacional de aquella ciudad ecuatoriana.

Al año de su detención, cuando debían ser juzgados o puestos en libertad, el juez amplió las denuncias contra ellos y de ahí que les acusara de asociación ilícita. Ese segundo proceso, que les podría acarrear varios años más de privación de libertad, ha estado relegado, pero recientemente se ha reactivado y afecta, principalmente, a María Antonia, ya que Manolo ha pedido la extradición y si se la conceden cumpliría esos hipotéticos años añadidos también en España.