Cuando la opinión pública aún no se ha recuperado del asesinato de
dos niñas en Soham, Inglaterra, en EE UU ha sido arrestado un
hombre acusado de secuestrar a otras dos menores. En su casa han
aparecido restos humanos.
Agentes del FBI (policía federal) registraron ayer la casa de un
sospechoso en la desaparición de dos niñas de 13 años hace varios
meses, después de que hallaran restos humanos en un cobertizo.
Mientras los restos de una persona son examinados para su
identificación, los agentes federales se preparan para excavar bajo
una placa de hormigón que fue colocada en el jardín trasero de la
casa poco después de las desapariciones, declaró el agente Charlie
Matthews, jefe de la oficina del FBI en Portland.
La Oficina Federal de Investigaciones está convencida de que el
antiguo inquilino de la casa, Ward Weaver, está relacionado con la
desaparición de las niñas Ashley Pond y Miranda Gaddis, que vivían
en el mismo edificio de apartamentos y desaparecieron en enero y
marzo, respectivamente.
Weaver, que vivía en esa casa de alquiler, fue expulsado después
de haber sido detenido recientemente por la acusación de la
violación de la novia de su hijo, un cargo por el que está en
libertad provisional bajo fianza a la espera de juicio.
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