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La Audiencia de Palma ha condenado a una compañía aérea a que indemnice a una pasajera, que sufrió un accidente en un vuelo que transcurrió de Mallorca a Granada. La pasajera tropezó con algún objeto que se había dejado en el pasillo del avión. Este tropiezo motivó que la mujer cayera al suelo y se golpeara. Sufrió lesiones en las cervicales, que le obligaron a someterse a un proceso de rehabilitación para recuperarse de estas dolencias. El juez de primera instancia fijó una indemnización de 1.432.454 pesetas por los daños sufridos y por los días que precisó para recuperarse.

La compañía aérea no sólo se opuso a la demanda, sino que recurrió la sentencia que le condenaba a indemnizar a la pasajera. La compañía entendió que la demanda había prescrito y que la mujer no había podido determinar de qué forma se había producido la caída. La sentencia de la Audiencia reconoce que la pasajera «ha podido sembrar la duda», puesto que unas veces declaró que había tropezado con una bolsa de viaje y otras que no recuerda qué objeto le hizo caer. La mujer tampoco recordó si había caído hacia delante o hacia atrás. Sin embargo, el tribunal cree que las lesiones que sufrió la mujer acreditan esta caída dentro del avión.