Un tribunal de Bruselas condenó ayer a 20 y 15 años de prisión,
respectivamente, a Peter Uwe Schmitt y Aurore Martin, por el
asesinato del marido de ésta para cobrar varias pólizas de seguros
de vida. Los hechos ocurrieron la noche del 10 de mayo de 1995
cuando ambos acabaron con la vida de Marc Van Beers en un accidente
de coche simulado en Córcega.
En el juicio se supo que Schmitt y Martin, que mantenían una
relación amorosa, habían seleccionado a su víctima mediante una
agencia matrimonial. Aurore Martin contrajo matrimonio con Van
Beers y viajaron a Córcega en su luna de miel. Los forenses
aportaron las pruebas que permitieron conocer que el marido de
Martin no murió por las heridas sufridas en el accidente de coche
en el que viajaba con su esposa. A Van Beers le mataron a golpes
con un bate de béisbol y después su cadáver fue colocado en el
automóvil, que fue despeñado por un acantilado. La viuda declaró
que se salvó al abrir la puerta antes de que el vehículo cayera al
barranco y que sacó el cuerpo de su marido y lavó sus heridas en el
mar.
El testimonio de la segunda mujer del padre de Aurore fue
determinante, ya que contó que la acusada le reveló que ella y su
amante habían sido quienes, con ayuda de cómplices, asesinaron a
Van Beers.
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