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Un niño extranjero de dos años de edad, llamado Lian, falleció a primera hora de la tarde de ayer tras haber caído el pasado viernes a una piscina de una finca de Llucmajor. El pequeño se cayó a la piscina de esta finca que está situada cerca de la carretera de s'Aranjassa. Los adultos que se encontraban con el menor se dieron cuenta demasiado tarde de que el niño había caído al agua, y no supo salir a flote. Uno de ellos se lanzó a la piscina y rescató al menor. Inmediatamente se avisó del incidente a los servicios sanitarios, para que enviaran una ambulancia al lugar de los hechos.

Una unidad del 061 fue la que se desplazó a la finca. El sanitario sometió al niño a las maniobras de reanimación, logrando que reaccionara. Sin embargo, el estado del niño era muy grave porque había pasado demasiado tiempo bajo el agua. La Guardia Civil y la Policía Local de Llucmajor montaron una «alerta verde» para facilitar el traslado del niño hasta el hospital de Son Dureta, donde fue conducido por la ambulancia. El estado de la víctima fue empeorando y los médicos temieron lo peor. El pequeño murió alrededor de las dos de la tarde. Su muerte fue comunicada al Juzgado de Guardia de Palma, que ordenó el traslado del cadáver al anatómico.