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El hombre que quedó parapléjico tras ser agredido por un atracador en su vivienda de Son Armadans fue atacado por la espalda. Esta es la conclusión que mantuvieron ayer los médicos forenses, que explicaron en el juicio que la víctima había sufrido cuatro heridas en la espalda. La más grave le seccionó parte de la médula. El herido tuvo que ser sometido a un intervención urgente. El cirujano que le operó retiró la punta del cuchillo, de unos siete centímetros, que había penetrado en el canal medular. Los forenses confirmaron que el paciente no tiene sensibilidad en las extremidades inferiores debido a esta irrecuperable lesión en la espalda.

Con respecto a la forma como se había producido el ataque, los forenses explicaron que lo más lógico era pensar que la víctima se encontraba de espaldas cuando el agresor le clavó el cuchillo, ya que se trata de una lesión que precisa una gran fuerza. En este sentido hicieron hincapié en que la víctima no presentaba ninguna lesión de defensa, por lo que es imposible que el arma se la hubiera clavado en un forcejeo con el agresor, tal como sostiene el acusado, Antonio M.F.

Por otra parte, los médicos confirmaron que el día que el acusado fue detenido no mostraba ningún síntoma de abstinencia ni lesiones de lucha. Antes de que se iniciara la segunda sesión del juicio el acusado manifestó su deseo de cambiar de abogado. El letrado defensor de oficio se mostró dispuesto a renunciar, aunque el tribunal no lo ha aceptado.