P. Matas16/05/01 0:00
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José Principal García, de 77 años de edad, falleció ayer después de haber estado en coma irreversible a lo largo de siete días. El lunes de la semana pasada, entre la una y media y las dos de la tarde, el hombre fue atropellado por un autobús de la EMT en la calle Indalecio Prieto, en la palmesana barriada de Son Gotleu. El autobús procedía de la calle Tomàs Rul·lan y tuvo que efectuar un giro a la izquierda para seguir su trayectoria normal hacia Indalecio Prieto. A pocos metros hay un paso de cebra regulado por un semáforo.

Francisco, uno de los hijos del fallecido, cuenta que su padre había llegado ya casi al otro extremo del paso de cebra cuando fue arrollado por el autobús, saliendo despedido del golpe y quedando tendido sobre la acera. Acudió una ambulancia cuyos sanitarios hicieron lo posible para reanimar al hombre. Pero su estado era muy grave y cuando era trasladado a la clínica Rotger perdió el conocimiento, que ya no volvió a recuperar. José recibió un golpe en la cabeza que le provocó una hemorragia cerebral, además de la rotura de cuatro costillas y varios golpes y hematomas. A primera hora de la mañana de ayer el hombre falleció.

Desde que se produjo el atropello nadie de la EMT, ni tan siquiera el chófer que conducía el autobús en el momento del atropello, se ha puesto en contacto con la familia. Uno de los hijos lo comentaba ayer a este periódico al tiempo que manifestó lo problemático que es el semáforo donde ocurrió el accidente. «De parte a parte del paso de cebra -añadetranscurren sólo siete u ocho segundos para el paso preferente de peatones, con lo que es prácticamente imposible que una persona mayor tenga tiempo de cruzar.

Después del atropello una patrulla de la Policía Local efectuó el correspondiente atestado. Parece que en el mismo se señala que el conductor del autobús disponía de buena visibilidad cuando se produjo el atropello. Otros datos, como el color del semáforo, pertenecen a la investigación que se lleva a cabo. En el momento del atropello había muchos testigos en el lugar y todos se han mostrado dispuestos a prestar declaración sobre lo ocurrido.