Francisco M.F. no quiso ayer prestar declaración ante el juez de Palma. Foto: J.F.M.

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J.F.M./P.M. Francisco M.F., el joven que fue detenido en Madrid acusado de su implicación directa en el doble crimen de Son Banya, fue presentado ayer ante el juez de Palma que incoa el sumario del caso. Como ya se informó el pasado domingo en este periódico, el joven llegó el sábado a la cárcel de Palma donde fue trasladado desde la de Alcalá Meco (Madrid). Cuando fue detenido hace unos dos meses en la capital del Estado, el joven dio la identidad de su hermano, Ramón, y hasta hace unos días no se pudo confirmar su verdadero nombre en base a las huellas dactilares y una investigación de la Policía Científica. No obstante, ayer, cuando fue preguntado por el juez el joven sólo reconoció sus apellidos y quiso dejar sembrada la duda sobre el nombre, aunque a nivel oficial el caso está ya aclarado.

Además de la acusación de su participación directa en el asesinato de dos chinos en el poblado de Son Banya, ocurrido el día seis del pasado mes de enero, también se le acusa a él y a su hermano en otro asesinato ocurrido a finales del verano del pasado año en Madrid. Este fue el motivo por el que tanto los dos hermanos como varios familiares huyeron de la capital y se trasladaron a Mallorca. Una vez en Palma buscaron refugio y varios de ellos fijaron su residencia en una de las casas abandonadas situadas muy cerca del poblado, mientras que el resto de la familia se instaló en Son Gotleu. Ayer, en su presentación ante el juez, fue informado oficialmente de que está acusado de asesinato y narcotráfico. Una vez cumplimentado el trámite fue reingresado a la cárcel de Palma, donde está aislado de algunos de los otros detenidos en relación al doble crimen.

Como también se ha venido informando en este periódico, el móvil del doble crimen fue el robo de unos tres kilos de cocaína que tenían en su poder los dos chinos y que, en principio, acudieron a la cita con la intención de vender la droga. En base a las declaraciones de algunos de los implicados se ha sabido que un kilo de la cocaína estuvo en casa de una mujer conocida con el apodo de 'La Balbina', madre del niño que fue asesinado un mes después en Son Gotleu y cuñada de 'El Jeromo', encarcelado por el doble crimen. Precisamente esta mujer intentó contratar los servicios de un detective privado para que localizara al joven que ella cree que mató a su hijo.