TW
0

Prudencio Domingo Mora Mena, un vecino del Pont d'Inca de 70 años de edad, falleció el jueves en una finca de Santa Maria del Camí aplastado por una escultura de piedra de 500 kilos a la que se subió para coger unos brotes de olivo, según informaron en fuentes de los bomberos de Inca y de la Guardia Civil. La víctima estaba acompañada por su sobrino de 40 años en el momento del accidente, que sucedió a las 10.30 horas en una finca de las afueras de aquella localidad y que pertenece al escultor Xavier Llull, según indicó la Policía Local de Santa Maria.

Los bomberos de Inca, que se desplazaron al lugar del suceso con carácter de urgencia, tuvieron que utilizar para levantar la escultura unos cojines de aire que normalmente se usan en casos de derrumbamiento y otras emergencias de grandes dimensiones.

Los bomberos señalaron que la víctima murió en el acto completamente aplastado por la escultura de Llull, de unos 500 kilos de peso. En el momento del accidente el artista no se encontraba en su casa. Sí estaban sus dos hijos, de 10 y 15 años. El artista se puso ayer en contacto con este periódico y se mostró muy afectado por lo sucedido: «Yo, a ese hombre no lo conocía personalmente, pero sí a su sobrino, al que le compro libros. Le dije que podía coger todas las ramas que quisiera; sin embargo, cuando llegaron a mi casa yo estaba en el aeropuerto y no coincidí con ellos». Llull explicó que la escultura -de 70 centímetros de alto, 1.20 de ancho y 50 de profundidad- no estaba amarrada porque estaba expuesta al público para las personas que visitan su casa taller y manifestó que el anciano murió al instante, aplastado por aquella mole.

«Mi hija llamó enseguida al 112, pero ya no había nada que hacer. Estoy muy preocupado por todo lo que ha sucedido y, además, por cómo superarán mis dos hijos este trauma, todo lo que ha pasado es muy fuerte y doloroso para todos», añadió. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación del accidente y el informe será remitido a la autoridad judicial.