Un hombre de 35 años, vecino de Palma, ha sido detenido por la
Policía Local acusado de maltratar físicamente a su esposa, que a
consecuencia de los golpes recibidos con una escoba tuvo que ser
atendida en un centro hospitalario.
A las tres de la tarde la Policía Local fue informada de una
agresión familiar en un domicilio de Ciutat, por lo que un coche
patrulla se desplazó a toda prisa hasta esa dirección. Según costa
en el atestado policial, el requiriente era un agente fuera de
servicio que había escuchado gritos y llantos de una mujer en un
piso vecino. Al acudir para interesarse por lo ocurrido, vio, a
través de la puerta abierta, cómo un varón golpeaba violentamente a
una mujer extranjera.
El funcionario intervino para separar a los cónyuges y luego
pidió ayuda al 092. Cuando sus compañeros llegaron, la víctima se
encontraba muy nerviosa y presentaba el rostro amoratado por los
golpes recibidos con una escoba. Los comparecientes observaron cómo
sangraba por la nariz y el labio y procedieron a trasladarla hasta
un centro hospitalario para comprobar su estado. El facultativo de
guardia refirió que los hematomas y golpes no revestían excesiva
gravedad y parece ser que la mujer recibió el alta médica.
Su esposo, mientras tanto, fue arrestado y cuando uno de los
policías le leía sus derechos manifestó, en repetidas ocasiones,
que deseaba ingresar en la cárcel. La última palabra, sin embargo,
la tiene el juez.
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