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Mohamed A., el hombre que supuestamente quemó a su novia y le causó la muerte, ingresó ayer en prisión. El marroquí llevaba más de un mes ingresado en el Hospital General, recuperándose de las quemaduras en los brazos y en la cara.

Ana Torres Maqueño murió por un incidente que se produjo en la tarde del día 8 de enero, en un taller de confección situado en la calle Josep Zaforteza Musoles, en Son Gotleu. Según parece, la mujer, que estaba casada y tenía una niña, discutió con el marroquí, que se dedicaba a la confección de prendas de piel. Un testigo vio como el marroquí le lanzaba a la mujer cola de contacto y después le prendía fuego. La víctima empezó a gritar y salió a la terraza envuelta en llamas. Al parecer, el marroquí se mantuvo inmóvil. Los vecinos escucharon a la mujer que gritaba «¿por qué me has hecho esto?».

Sufrió quemaduras en el 90 por ciento del cuerpo. Fue trasladada a Barcelona, y al día siguiente murió. Mohamed fue interrogado por el juez cuando estaba en el hospital. Se declaró inocente y mantuvo que Ana Torres se quemó por accidente. Afirma que había un bote de cola sobre la estufa, cayó encima, y como ella fumaba, se quemó.