El comisario Mut es -en el escenario policial actual- el nuevo
'hombre fuerte' del cuartel de San Fernando y uno de los más
estrechos colaboradores de Sierra. Ayer reiteró que unos de los
objetivos fijados con la redistribución operativa es «estar más
cerca del ciudadano» y ser más eficaces. Mut manifestó que el
policía de barrio deberá ser conocido por todos los vecinos y que,
además, el resto de unidades apoyarán a estos agentes.
Asimismo, el comisario jefe destacó que es necesario 'motivar' a
los propios policías y que para lograrlo se establecerán «controles
de calidad», que supervisarán el trabajo realizado por la policía.
De esta manera, se realizarán reuniones periódicas de seguimiento
de los objetivos operativos y las entidades ciudadanas recibirán la
correspondiente invitación para participar en estas sesiones e,
incluso, aportar ideas. «El ciudadano es el centro de nuestro
trabajo», recalcó Mut, que también opinó que será necesario
estrechar los lazos con el Cuerpo Nacional de Policía y, en menor
medida, con la Guardia Civil (ya que este organismo apenas
interviene en Palma).
El lema de la Policía Local seguirá siendo «creamos seguridad y
mejoramos la calidad de vida» y de la anterior reestructura de hace
dos años sólo se mantienen las unidades territoriales (Levante,
Poniente, Norte y Centro). La Unidad de Intervención Inmediata
(UII) es otro de los grandes recuperados del nuevo plan de Cort y
también se pretende potenciar la Unidad Nocturna, que tiempo atrás
gozó de un gran prestigio. Por último, Mut y Ferrando descartaron
que la nueva Policía Local de Palma compita con la policía de
Proximidad del Cuerpo Nacional de Policía, cuyas funciones pueden
ser similares.
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