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EFE-VIENA
El rescate de las más de 150 víctimas mortales del funicular incendiado el sábado en Austria cuando ascendía al glaciar alpino de Kitzsteinhorn no comenzará hasta hoy por razones de seguridad, anunció el gobernador de Salzburgo, Franz Schausberger.

Hasta ahora, se calcula que en el interior del convoy incendiado hay 155 cadáveres, aunque la cifra de víctimas mortales podría ascender a las 170, añadió. Las dificultades para asegurar el trabajo de los equipos de rescate en el túnel de 3'2 kilómetros por el que circulaba el funicular retrasaron ayer todos los intentos de extraer los cuerpos.

Tras señalar que la mayoría de las víctimas no podrán ser identificadas más que mediante un análisis genético, dado el estado de los cadáveres, dijo que el retraso en su traslado se ha debido también a que los helicópteros no pueden operar de noche para bajarlos al valle desde el pie del glaciar.

Agregó que unos 80 hombres trabajan simultáneamente en el interior del túnel donde están los cuerpos calcinados de las víctimas, que perecieron probablemente asfixiadas por el humo tóxico que se produjo con el fuego y que subió como por una chimenea hasta la estación terminal al pie del glaciar, donde perecieron tres personas intoxicadas.

Los gases letales mataron también en su recorrido ascendente al conductor del funicular que, en ese momento, bajaba al valle y que presumiblemente viajaba vacío.