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Rafael Cenoz, el ex policía nacional que incendió el apartamento de su ex compañera sentimental en Calvià, padece delirios. Así lo afirman los cinco médicos (tres psiquiatras y dos forenses) que declararon como peritos en el juicio que se celebró ayer en la Audiencia de Palma, y que se inició con un incidente protagonizado por el acusado.

Cenoz, que ya fue condenado por el asesinato en 1983 de una mujer en Bilbao, fue detenido en el mes de enero de 1998 en Calvià tras incendiar el apartamento de su ex compañera. La víctima había abandonado su domicilio al sentirse acosada y amenazada por el ex policía nacional, con el que había mantenido una relación sentimental. Cenoz, además, también había amenazado a la hija de su ex novia. El día de los hechos el acusado pidió la ayuda de unos vecinos para abrir la puerta del apartamento. Después lo incendió.

Los médicos que han estudiado la personalidad del acusado lo califican de paranoide, que sufre delirios. Cenoz, a juicio de los especialistas, es rencoroso y muy celoso, y se sospecha que actuó por venganza. Uno de los psiquiatras señaló que, pese a que sufre delirios, el acusado es consciente de lo que hace, aunque después es capaz de convencerse de la historia que se inventa para justificar su actuación. Los dos forenses que actuaron como peritos coincidieron en que Rafael Cenoz es inimputable, puesto que se trata de un enfermo paranoide.

El fiscal, que solicitaba antes del juicio una condena de 15 años de cárcel, cambió su postura y planteó dos acusaciones alternativas. El fiscal Gabriel Rul.lan, como acusación principal, pide que se absuelva al acusado al tratarse de un enfermo mental, y que se le recluya en un centro especializado por un periodo máximo de 20 años. Si los jueces no creen que se trate de un enfermo, la acusación reclama una condena de 15 años de prisión.

Matías Mut, el abogado que representa la acusación particular en representación de la dueña del apartamento, rechaza que Cenoz ingrese en un psiquiátrico, y por ello solicitó al tribunal una condena de 20 años de cárcel.