Javier Jiménez19/08/00 0:00
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Decenas de personas visitan a diario en la Comandancia palmesana, en la calle Manuel Azaña, la exposición de joyas y efectos robados recuperados recientemente por la Guardia Civil. Los agentes han esclarecido más de treinta robos y buena parte del material interceptado, valorado en 20 millones de pesetas, ha sido ya devuelto a sus legítimos propietarios.

Los responsables de la operación, que se saldó con siete detenidos, están muy satisfechos con los resultados, aunque de momento no la dan por cerrada y están pendientes de practicar nuevas detenciones. En un primer momento desde la 313 Comandancia se informó que los robos de la banda se habían perpetrado en los últimos tres meses en pueblos de la zona Centro y de Levante, como Inca, Felanitx, Manacor, Vilafranca, Porreres, Costitx, Sineu, Bunyola y Campanet. De las diligencias practicadas se desprende que Palmanova y Andratx fueron otras de las zonas «visitadas» por los acusados, que se dedicaban a reventar cajas fuertes. Buscaban, casi exclusivamente, joyas o dinero en efectivo y no tenían «vicios» conocidos en donde invertirlos, ya que ninguno de ellos era toxicómano.

Las cajas de caudales, en ocasiones, eran forzadas en el mismo chalet, pero otras veces los delincuentes conseguían desencajarlas y las cargaban en su coche o furgoneta. Luego, en un lugar más apartado, la violentaban con total impunidad. Entre los efectos recuperados por la Benemérita en cuatro pisos «francos» no sólo destacan relojes y joyas, sino que también se encontraron máquinas de planchar, televisiones o equipos de música. La exposición permanece abierta de las 9.00 a las 14.00 horas y de las 17.00 a las 20.00 horas, todos los días de la semana salvo los sábados y domingo. Los pasillos de la 313 Comandancia son, desde el jueves, un continuo ir y venir de personas interesadas en la muestra.