Tomeu Barceló, un vecino de Porreres de 17 años de edad, perdió la
vida a primera hora de la tarde de ayer cuando practicaba
submarinismo en aguas de la Colònia de Sant Jordi, según informaron
en fuentes del servicio de emergencias 112 y de la Guardia Civil.
Hoy está previsto que se le practique la autopsia para confirmar
las causas de la muerte.
La víctima y un amigo de su misma edad, también residente en
Porreres, habían decidido pasar el día buceando cerca de los
islotes de la playa de Coto, en la Colònia. Los dos submarinistas
iban equipados con trajes de neopreno y uno de ellos, el que pudo
pedir ayuda, cuyas siglas se corresponden con las de J.B., portaba
bombonas de oxígeno para sumergirse a mayor profundidad. Tomeu y su
acompañante llegaron a la 'Isla Larga' a bordo de un llaüt
propiedad del abuelo del segundo y se arrojaron al agua.
La víctima buceaba a unos 9 metros, seguido de cerca por su
amigo, que lo hacía a mayor profundidad. A eso de la una de la
tarde, el otro vecino de Porreres reparó en que Tomeu tenía
problemas y nadó hacia él. Cuando llegó a su lado parece ser que el
submarinista ya se hallaba inconsciente. J.B. intentó reanimarlo
por todos los medios, pero el buceador no respondía. A continuación
pidió ayuda a gritos e hizo aspavientos a un barco que navegaba por
las inmediaciones, de nombre «Teix».
La tripulación, una vez informada de lo ocurrido, se dirigió al
puerto de la Colònia y regresó con una segunda embarcación. La
víctima mortal fue sacada del agua y trasladada a tierra firme,
donde esperaban sanitarios del servicio del 061, que sólo pudieron
confirmar el fallecimiento. El buceador superviviente se encontraba
bajo estado de 'schok'; era amigo íntimo de la víctima, jugaban
juntos al fútbol y el terrible e inesperado desenlace lo dejó
destrozado.
Los GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) y la
Policía Judicial de la Guardia Civil de Manacor se hicieron cargo
de la investigación. Una de las principales hipótesis sobre el
fallecimiento de Tomeu Barceló es que el joven no realizó de forma
adecuada la descompresión, tras haber bajado dentro del agua
bastantes metros a pulmón. El titular del juzgado de guardia de
Manacor fue informado de la muerte del vecino de Porreres y parece
ser que una comisión judicial estuvo presente durante el
levantamiento del cadáver.
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