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EFE-MAPUTO
Las víctimas mortales de la catástrofe causada por las inundaciones en el sur de Mozambique ascienden a millares y se teme que broten enfermedades contagiosas, a pesar de que las cifras oficiales hablan de sólo 164 muertos. Así lo declaró Michele Quintaglie, del Programa Mundial de Alimentos, al referirse a los daños causados por las inundaciones desde hace tres semanas, cuya magnitud sólo podrá conocerse cuando las aguas vuelvan a los cauces de los ríos.

La carencia de agua potable, el aislamiento de decenas de miles de personas rodeadas por las aguas y la imposibilidad de socorrer con rapidez a las víctimas -algunas «apresadas» desde hace más de dos semanas hacen prever un rápido contagio de enfermedades como el cólera y la malaria, señaló Quintaglie. El Centro Nacional Mozambiqueño para el Auxilio en situaciones de Desastre dijo que en Chokwe, la capital provincial de Gaza con 130.000 habitantes, las carreteras de acceso a la ciudad habían sido «barridas» por las aguas.

Las autoridades han hecho un llamamiento para pedir ayuda urgente a la comunidad internacional y calculan la cifra de damnificados sobre las 400.000 personas.