Los ladrones reventaron la caja fuerte de la gasolinera de Sant Llorenç, pero se encontraron con que estaba vacía.

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El asalto fallido a una gasolinera de la carretera de Manacor a Portocristo supuso, en la madrugada de ayer, que las comunicaciones telefónicas con la isla de Menorca quedaran suspendidas hasta la mañana. «La Banda del Butrón» asaltó tres estaciones de servicio y en la mencionada confundió un cable de fibra óptica con la alarma. Cuando lo cortó se produjo el caos en las comunicaciones entre las dos islas. La Guardia Civil lleva más de un año siguiendo la pista de esta organización, que ya ha «visitado» más de 20 gasolineras de Mallorca y una docena de naves industriales, la mayoría ubicadas en carreteras apartadas o lejos de cascos urbanos.

El último día que se tuvo noticias de los maleantes fue el 13, fecha de las elecciones, cuando sustrajeron 2.500.000 de pesetas de la caja fuerte de la gasolinera de Algaida. Hasta entonces habían cesado en su actividad, hasta que en la madrugada de ayer iniciaron un nuevo recorrido delictivo. Se detuvieron en tres gasolineras: la de Manacor a Portocristo, frente a la finca de Santa Silvia; la de Ariany, en la vía que enlaza Petra con Santa Margalida; y por último la de Sant Llorenç, en el kilómetro 56 de la carretera Palma-Cala Rajada.

En cada estación de servicio siguieron el mismo modus operandi: comprobaron que los recintos estaban desiertos, efectuaron butrones y accedieron a las oficinas. Reventaron, con maquinaria especial, las tres cajas fuertes, pero se encontraron con la sorpresa de que en ninguna de ellas había dinero en efectivo. Pero el asalto que supuso un trastorno mayor para los ciudadanos, en especial los de Menorca, fue el registrado en la gasolinera de Manacor.