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J.JIMÉNEZ La montaña mallorquina volvió a mostrar el domingo sus peligros, pero, a la postre, la perdida de dos excursionistas tuvo un final feliz. El matrimonio británico formado por Richard Flower y Jean Barbara, ambos de 61 años de edad, se adentró en la tarde del domingo en una montaña de Orient, en el municipio de Bunyola. Los dos extranjeros se extraviaron y no supieron regresar al punto donde habían estacionado su vehículo. Sobre las siete de la tarde, ya cansados de andar y con problemas por la oscuridad, el varón se puso en contacto desde su teléfono móvil con el Centro de Emergencias del Govern Balear 112, que les solicitó su ubicación aproximada y dio aviso a la Guardia Civil.


La 313 Comandancia de la Guardia Civil de Palma, tras recibir la señal de alarma, puso en marcha un dispositivo encaminado a rescatar a la pareja. Los agentes se desplazaron hasta las inmediaciones de Orient, pero la falta de luz solar imposibilitó que se adentraran en la zona montañosa. Un portavoz de la Benemérita señaló que si la vida de los dos ingleses hubiese estado en peligro se las habrían apañado para llegar hasta ellos, pero al trascender que estaban en perfecto estado se decidió retrasar la operación hasta la salida del sol.

Richard y su esposa Jean Barbara parece ser que encontraron un refugio donde pasar la noche, en una madrugada lluviosa y de bajísimas temperaturas (alrededor de cero grados). A las nueve y media de la mañana la Benemérita encontró a la pareja, con síntomas de cansancio y de haber pasado mucho frío, aunque en buen estado.