Los mallorquines solemos interesarnos por los demás. Si vamos por la calle y nos cruzamos con algún conocido, le preguntamos amablemente cómo le van las cosas. Sin embargo, nunca esperamos que ese conocido con quien casualmente nos hemos topado vaya a explicarnos la verdad. Hay convenciones sociales que se sobreentienden, o se dan por sabidas, o por descontado. Si un mallorquín te pregunta cómo te va todo, da por supuestísimo que le vas a responder que bien, aunque estés padeciendo un ataque de apendicitis en ese preciso momento.
De hecho, en la mayoría de los casos, la pregunta no va más allá de un simple comentario amable, de una pregunta retórica que, ya se sabe, nunca espera respuesta. Seamos sinceros: hay respuestas incómodas o inconvenientes.
¿Somos sinceros?
Palma25/12/23 0:29
También en Opinión
- Alerta por chubascos fuertes y tormentas en Mallorca
- Fallece el primer turista de la temporada: un joven se precipita desde la azotea de un hotel de s'Arenal
- Las autocaravanas se plantan ante la ordenanza cívica
- Por qué deberías tomar zumo de limón por las mañanas
- Todo listo para la inauguración del nuevo Los Rafaeles
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.