TW
0

El Govern de José Ramón Bauzá se sale con la suya. Un 30% de padres que eligen el castellano como lengua vehicular de la primera enseñanza para sus hijos es un éxito político. Cómo dudarlo: hace dos años el 100% se hacía en catalán, el año pasado solamente el 13% de padres optaron por el castellano. Así que la comparación deja la conclusión en evidencia. Un triunfo político. Del anticatalanismo. Lo mismo es la aprobación y la machacona insistencia en que, contra viento y marea, va a imponerse caiga quien caiga el próximo curso el decreto de Tratamiento Integral de Lenguas (TIL), más conocido por el del multilingüismo. El objetivo del PP de Bauzá es meridiano y doble. Satisfacer los deseos de los colegios privados y, secundariamente, a los del Círculo Balear y allegados mediáticos. La primera parte se hace obvia al observar dónde se ha elegido más castellano en la primera enseñanza. En la educación privada, con más del 60%. La segunda merece consideración aparte. El anticatalanismo nunca ha tenido en Baleares ninguna incidencia electoral. Y siempre que ha emergido por encima de la ridiculez, sin acercarse sin embargo remotamente a la proximidad institucional autonómica, ha sido a costa del voto del PSOE. Así fue con el ASI (Agrupación Social Independiente) y es con UPyD. De ahí que la preocupación del PP con este último partido llama a la hilaridad. No hay ningún elemento que pueda hacer sospechar que el voto antinacionalista y pro castellanista de UPyD pueda hacer muesca en el sólido cesto conservador. No obstante, a despecho de cualquier racionalidad política y meramente por satisfacer a sus anticatalanistas internos y allegados, amén de cubrir legalmente el hecho de que los colegios privados den menos en catalán, Bauzá y el PP no dudan en incendiar los colegios públicos, irritando a profesores y padres con la pantomima del inglés que nunca se pondrá en práctica en la enseñanza de los pobres. En fin, así son las cosas aquí.